ArquÃloco de Paros
Considerado como uno de
los fundadores de la poesÃa griega, ArquÃloco, nació en Paros en los últimos
años del siglo VIII o, según otros, a comienzos del siglo VII a. de C., hijo
del noble Telesicles y de una esclava tracia de nombre Enipo. Debido a las
malas condiciones económicas que afligÃan a su familia, fue obligado a emigrar
a la isla de Tasos, donde esperaba encontrar la fortuna. Pero, al darse cuenta
de que Tasos era una isla muy pobre, refugio de las personas con peor fama de
toda Grecia, las esperanzas del poeta no se pudieron ver más que frustradas.
Cada vez más pobre, aislado en un ambiente hostil, mirado por todos con el
caracterÃstico odio del vulgo hacia el noble decaÃdo, ArquÃloco se convirtió en
soldado mercenario, para intentar ganarse la vida al precio de su vida. Ésta
fue la señal no sólo de la separación definitiva del poeta del mundo en el que
hasta entonces habÃa vivido, sino también la razón principal de que le
rechazara la mujer amada, Neóbula, que su padre Licambes, un conciudadano de
Paros, le habÃa prometido en matrimonio. Rechazado por la sociedad y por su
amada, hizo de ello tema de su poesÃa, cruda y satÃrica, siendo el primer poeta
de la Antigüedad en tomar la propia vida como referente poético. Pero que ArquÃloco no era cobarde quedó demostrado con el
hecho de que muriera combatiendo por su patria, no como mercenario, sino como
patriota, contra los habitantes de Naxos. Más tarde, los parios levantaron un
monumento en su honor y le tributaron culto como a un dios o a un héroe protector
de la isla, y en las paredes de aquel templo grabaron muchos de sus versos.
Cuenta la leyenda que quien mató al poeta fue un tal Calonda, y que habiéndose
éste dirigido un dÃa a Delfos, Apolo lo expulsó del templo, diciéndole:
"¡Vete! Has muerto al servidor de las musas". ArquÃloco es el primer
poeta de la literatura griega en cuya biografÃa es posible fijar una fecha
segura: en un fragmento de sus poesÃas describió un eclipse de sol que casi con
toda seguridad tuvo lugar el dÃa 6 de abril del 648, o, según cálculos más
recientes, del 647 a. de C., eclipse que fue visible en todas las islas del mar
Egeo. Muy probablemente, el poeta murió unos años después.
Se conserva
poca evidencia de su vasta y celebrada producción, apenas unos pocos fragmentos de sus Yambos y de sus ElegÃas. Su
celebridad reposa sobre todo en sus Yambos, que incluyen composiciones en metros yámbicos y
trocaicos. Más aún: se pretendÃa que el yambo, ritmo vivaz y discursivo, habÃa
sido inventado por él. Los yambos de ArquÃloco, subjetivos, realistas, prontos
a la invectiva y al escarnio, pasaban por ser los precursores de la poesÃa
cómica y satÃrica. También, en los escasos restos de su obra, tenemos algunos
fragmentos de ElegÃas. En la clasificación tradicional griega el
término de elegÃa, más que definir un contenido, indica la forma métrica que
une hexámetros y pentámetros en dÃsticos. ArquÃloco la utilizó ya para esbozar
con unos pocos rasgos sintéticos su propio retrato de poeta guerrero, ya para
recordar vicisitudes de guerra y de viajes, ya para consolar, con viril acento,
a un amigo en desgracia.
De sus poesÃas
se deduce mucho acerca de sus amores con Neóbula, hija de Licambes, el cual
rompió la promesa hecha al poeta de casarle con ella, y aunque en su poesÃa hay
alusiones al amor de ArquÃloco por Neóbula, el odio del poeta le hace lanzar
sus envenenadas sátiras, para vengarse no sólo de Licambes sino también de su
hija. Según una tradición posterior, tanto el padre como la hija se suicidaron
por no poder resistir la difamación. En su poesÃa también podemos encontrar
como tema recurrente la guerra, debido a sus años como mercenario. ArquÃloco se
presenta como un poeta soldado y habla de sus experiencias con gran pasión.
Su poesÃa es de gran sinceridad, y destaca formalmente por el
uso del metro yámbico para temas satÃricos, razón por la cual se le considera
uno de los principales renovadores de esta forma. Sus Yambos fueron prohibidos en Esparta, ya que
iban dirigidos a Neobule y a su padre, y le acusaron de haber inducido a ambos
al suicidio. La caracterÃstica principal del arte de
ArquÃloco parece residir en su capacidad de expresar un afecto, incluso
violento, con lÃmpida sencillez, evocar una figura o un paisaje con pocas
palabras sugestivas y dar concreción y fuerza comunicativa al pensamiento.
Junto con Homero, ArquÃloco es considerado padre de la poesÃa
griega, Homero dando el modelo de poesÃa objetiva e impersonal, y ArquÃloco introduciendo
la poesÃa subjetiva, en la cual el poeta habla en primera persona y se toma a
sà mismo como el principal objeto de su canto. Poco puede juzgarse de la
grandeza del artista a base de los escasos fragmentos, pero aun asà bastan para
revelar una individualidad vigorosa, que ve el mundo en función de su propio yo
y desahoga en sus versos las raras alegrÃas y los frecuentes furores suscitados
por el choque entre su voluntad y el mundo.
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